CONOCIMIENTO
“El estudio del Conocimiento no se basa
en el acopio de información y de datos. El estudio del Conocimiento va más allá
de aprender conceptos escritos en libros u oídos por personas conocedoras del
Trabajo que hablan sobre ello. Es necesario integrar el conocimiento dentro de
uno mismo, y que en lugar de “saber” sobre el estudio del Conocimiento, seamos
parte del Conocimiento.
Saber es poseer información sobre algo
concreto sin necesidad de haberlo comprendido ni llevado a su aplicación. Se
pueden saber muchas cosas, poseer mucha información leyendo libros o escuchando
conferencias, pero la simple información no produce resultados transformadores
en la esencia de ningún individuo. Escribió el profesor Jacob Needleman:
“[...] Las
ideas filosóficas no cambian nada en la vida de un individuo. Sin el conocimiento
práctico de cómo llevar las grandes ideas al corazón e incluso a los tejidos
del cuerpo, la filosofía no nos puede llevar muy lejos.”
Los estudios sobre el Conocimiento, para que den resultados reales, han de ser comprendidos, es decir, integrados en la esencia de uno mismo. El Conocimiento aprendido tan sólo es válido de esta manera. Comprender, entonces, es integrar dentro de sí una información concreta, convirtiéndola en parte de uno mismo.
El estudio del Conocimiento no termina en la comprensión. La comprensión transporta al estudiante al conocimiento práctico de la información asimilada e integrada. En un contexto esotérico, el Conocimiento es la aplicación práctica del saber y la comprensión en el momento, situación y ámbito requerido. La experiencia es fundamental para llegar al Conocimiento. El Conocimiento es el saber-hacer, y el saber-hacer de un individuo llega con la experimentación de lo asimilado. A su vez, la asimilación del Conocimiento puede llegar con la experiencia. Cada aspecto de la Realidad puede ser conocido de múltiples maneras, dependiendo de las características que componen a cada ser humano.”
Por Álvaro González